Para ese tiempo me gustaba participar en muchas actividades deportivas, me inscribía en cualquier competencia. Pero por más que me esforzaba, siempre llegaban a estos eventos, deportistas a nivel nacional o profesional, por lo cual era de esperarse, ganaban estas competencias.
Aunque era verdad que lograba ocupar terceros y cuartos puestos. Sentía mucho de desanimo, ya que soy muy competitivo y no entendía el porqué de la diferencia, entre estos deportistas de élite y la mía.
En realidad me consideraba una persona en muy buen estado físico, que entrenaba todos los días, pero entendí desde ese día, la importancia de un método integral o un especialista en esa disciplina, que ajustara lo que faltaba, lo cual permitiría, pasar de ser un deportista normal a un deportista de alto nivel.
En ese tiempo conocí un personaje muy enigmático y solitario, aunque al momento de socializar era muy abierto a conocer nuevas personas en su mundo.
En un momento dado le hice la pregunta del por qué esa diferencia de estado físico, fue ahí en donde me hablo por primera vez del Chi-Kung.
Por lo que empecé a entender, la importancia de respirar correctamente, de entrenar mi respiración y hacerlo no solo en la práctica, sino en mi diario vivir, por eso el Chi-Kung, es un pilar importante en el entrenamiento en KWD.
El nombre de esta persona que conocí, es Oscar, lo llamo Si Fu Oscar y es hasta la fecha, un excelente e integral exponente de las artes marciales en Colombia; tuve la oportunidad de compartir mucho con él y empezar a orientar mi practica marcial a un nivel mucho más alto.
También aprendí en realidad como era un artista marcial completo, motivándome a conocer más y en especial de las artes marciales mixtas.
Recuerdo que nos citábamos para hacer retos de entrenamientos extremadamente fuertes, que podían llevar desde muy temprano en la mañana, hasta ya casi al anochecer, sin parar, solo consumiendo agua, de esa manera podía ver como cada meta que yo superaba, era solo un medio para alcanzar una nueva meta superior.
Hace más de 25 años no entreno con él, pero conservo su amistad y a veces hablamos sobre diferentes temas, en especial de las artes marciales.
Como consecuencia de su amistad pude entender como existen grandes guerreros entre nosotros, viviendo una vida simple de práctica continua.
Desde el punto de vista de KWD, entendemos que ser un artista marcial, implica que en su camino debe aprender sobre muchas áreas del conocimiento, la práctica física y mental, el cosmos, alimentación adecuada, Chi-kung, combate en sus múltiples facetas y manejo de armas marciales.
Siempre entendiendo que aunque guardemos muchos conocimientos, también debemos tener una mente abierta, para el continuo mejoramiento de las artes marciales mixtas.
Gracias por leerme y hasta la próxima.